Periodista, Escritora y Egiptologa.
Licenciada en Comunicación social. Especializada en: Periodismo Educativo y Científico por la O.E.A; Lenguaje Periodístico por la Univ. Católica Argentina; Dirección de M.C.S. por la Presidencia de la Nación Argentina. Dilatada experiencia en televisión, radio y prensa escrita en Argentina y España. Actualmente trabajo como escritora. Resido en las Islas canarias.
SILVIA MUNAFÓ TORRES.
INICIACIONES EGIPCIAS.PARTE XXIV.
CONCLUSIÓN (Iniciaciones en el presente).
En la actualidad aquel que siente el llamado de EGIPTO, como un camino al despertar y que se adentra por sus maravillosas tierras, no realizará las mismas pruebas, no aprenderá con las láminas, sino que la tarea es distinta, pero no por ello más fácil.
Había escuchado en muchas oportunidades a iniciados habían ido y su vida se había desmoronado a su regreso. Hoy voy a transmitirles lo que aprendí al respecto, he necesitado doce años para comprender y asimilar lo ocurrido, les revelaré algo que no se halla en ningún libro, uno de los secretos más profundo del país del Nilo. Como es una iniciación en la actualidad en Egipto y lo que conlleva.
No es lo mismo ir como mero turista, que ir escudriñando respuestas, si buscas sabiduría tendrás que ir con el alma, la mente y el corazón abierto. Y eso te hace es más permeable a las vibraciones que las piedras milenarias transmiten.
Me ocurrieron muchas cosas bellísimas inexplicables, apenas puse un pie en esas tierras, y a partir de allí no alcanzaba a reponerme de una experiencia que otra venía a mi encuentro. Pero mis vivencias personales y sus detalles no son lo importante, porque cada ser es único e irrepetible, Lo importante es que en ese viaje fui vibrando muy alto, tal vez por eso Egipto me acariciaba a cada paso en cada respiración. Los templos me hablaron de distintas formas, aunque no entendí en su momento las misivas.
El verde esmeralda del Nilo y los reflejos dorados que dibujaban los rayos de Ra sobre su superficie, la partida de Osiris en los atardeceres pintando el horizonte de naranjas exultantes y únicos, el canto de los pájaros, los paisajes anclados en un ayer, Isis rodeada de estrellas y planetas en la bóveda nocturna, el bullicio y los silencios, las piedras parlantes, el aire del desierto y sus doradas arenas, todo sin excepción transmitía mensajes, despertando vivencias arcanas que me llenaban de una plenitud imposible de explicar. Había regresado a mi hogar.
En el último viaje entre a la GRAN PIRÁMIDE, pero justamente al llegar a la rampa para subir a la cámara del Rey, mi ser inmortal y sabio, me golpeo en el pecho, literalmente sentí una mano que me cortó el paso, no permitiéndome continuar. Después mi vida comenzó a desmoronarse, comencé sentir una profunda desazón porque mi alma se había quedado entre las arenas doradas del desierto, entre las piedras milenarias, bajo el sol maravilloso de aquellas tierras.
Entonces al tiempo surgió un libro, no diré que me fue dictado, ni que soy un canal, ni un elegido ni nada parecido, porque pensarlo es EGO y eso es estupidez, sino que hubo una amplificación de mi conciencia y esta me atropellaba con palabras e ideas que no sabía de donde surgían. Me refiero al Libro de Maat- El Legado de Hermes Trismegisto. Luego surgieron dos libros más los que firmo como La Escriba.
Resumiendo, había bajado mi vibración y en un intento desesperado por elevarme, comencé a tener una gran catarsis interna, desde la oscuridad comencé a rasguñar las paredes de un pozo oscuro para retornar a la luz. Comenzaron las duras pruebas, no en el mundo subterráneo bajo las patas de la esfinge, sino en las zonas oscuras de mi interior, para realizar un profundo autoexamen y equivalente a las pruebas que superaba el neófito en el remoto pasado.
Egipto posee todas las energías, ambos extremos, y para quien va con la sensibilidad a flor de piel, esos bríos son muy poderosos. Puedo asegurar desde mi experiencia que :Es cierto, Egipto nos pone a prueba, depende de cada uno lo que traiga de allí, no es mala suerte, ni maldiciones, es la respuesta a lo que emitimos, a veces creemos que somos intocables, porque el ego es nuestro mayor enemigo en la ascensión.
Si vas a Egipto recuerda que él te devolverá energía de la misma naturaleza que tu proyectes, porque la ley de CAUSA Y EFECTO siempre se cumple y que en como toda GRAN INICIACION, pasarás por una noche oscura colmada de pruebas para demostrarte a ti mismo y al universo que estás preparado para recibir la instrucción celeste más elevada.
Debes saber que antes de finalizar la instrucción magistral de MIRS, debes aprender a vencer tus demonios internos y pagar lo que adeudes con la existencia, pero por sobre todas las cosas no olvidar que lo bueno y lo malo, las duras experiencias, las lágrimas y desvelos son parte del plan que proyectaste antes de encarnar. Que podrás superarlas con valor y sin decaer. Y por supuesto debes estar vigilando a tu ego.
Si temes a las maldiciones y supersticiones te llegaran, si buscas la luminaria de Egipto ellas te acariciaran. Depende únicamente de ti lo que lleves en tu mochila. Espero y anhelo poder regresar para finalizar esa GRAN INICIACION, seguramente será el Universo en su infinita sabiduría el que disponga cuando será el momento.
Creo que he aprendido la lección, me he podido perdonar y entender que esa noche oscura no fue un designio superior, para castigarme sino mi ser interno y divino que me hablaban, para que desde las profundidades de mi alma viese con claridad mis fallos, para que entendiera que nunca se puede bajar la guardia y que todo el poder y el misterio radica en las vibraciones que emitimos, que, aunque sutiles son tremendamente poderosas.
Asimilé que lo denso, aunque evidente carece de auténtica potestad y que no tiene mando alguno en nuestras vidas, que lo único importante radica en nuestros bríos, en que nuestros pensamientos, sentimientos, palabras y obras oscilen en la luz.
Aprendí que sin amor incondicional, respeto absoluto, perdón pleno, verdad imperiosa y justicia ilimitada hacia toda manifestación de la existencia es imposible estar en armonía con la divina presencia y que la oscuridad que un día emitimos, vuelve como un boomerang multiplicado en su justa medida para que asimilemos la enseñanza.
Espero haber sido de ayuda en tu travesía. Paz profunda.
SILVIA MUNAFÓ TORRES.
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